Un actor se graba su propio casting en casa y lo envía por la red. Es contratado por una marca comercial que produce el contenido. El argumento lo decidirá el espectador de forma interactiva, cuando se proyecte directamente en su cerebro sin necesitar pantalla o altavoz. Y la acción tendrá lugar en decorados... ¡obtenidos de sus propios recuerdos!. No nos lo inventamos. Son las conclusiones que sacamos tras nuestras charlas con especialistas en diferentes áreas del entretenimiento como Juanjo Rey, Paco Sáez, los hermanos Prada, o Unic Talents, que trabajan desde hace tiempo en el futuro del cine y los medios.