No podemos huir o escondernos de Dios. Una vez que abandonamos nuestros deseos, sueños, voluntad y nos dejamos encontrar por ese Dios maravilloso, descubrimos que Su intención no es dañarnos sino bendecirnos. Él nos formó incluso en el vientre de nuestra madre para Su propósito y ordenó todos nuestros días antes de que viéramos la luz del día.
Podchaser is the ultimate destination for podcast data, search, and discovery. Learn More