“Se ve que hace frío en El Vaticano”, decía un tuit de este sábado, acompañado por una foto del papa Francisco ataviado con un abrigo blanco inflado.

Ver al pontífice vestido en forma distinta a la habitual, más moderna, llamó la atención y la imagen se viralizó.

Pero no era una foto real, sino creada por una inteligencia artificial.

Una inspección cuidadosa muestra algunos errores en la imagen, pero la calidad es tan realista que es fácilmente confundible con una fotografía.

Esto abre una cantidad de preguntas y preocupaciones: ¿cómo vamos a hacer para darnos cuenta de cuándo una imagen es real y cuándo no, si la generación de imágenes por inteligencia artificial avanza tan rápido?

Este fue el tema en un nuevo espacio de Disrupción, Tecnología e Innovación que compartimos con Gastón González.

En la transmisión en video se pueden ver los aciertos y errores (cada vez menos perceptibles) de las imágenes creadas con las principales plataformas abiertas con inteligencia artificial: Dall-E, Midjourney y Stable Diffusion.