Seguir a Cristo no vale la pena, vale la vida.Resuenen las palabras de Juan Pablo II al inicio de su pontificado: Jóvenes, abran las puertas de par en par, con Cristo no se pierde nada y se gana todo"
Una enorme felicitación a la vida consagrada, quienes iluminan con su testimonio la vida de la Iglesia. Seamos todos los bautizados, ofrenda viva y agradable al Señor, e iluminados, iluminemos.
Miriam nos comparte su testimonio. Si experimentas el llamado de Dios para ser misionero por un año, por dos o para siempre... no tengas miedo de aceptar con generosidad.
¡Tú puedes! Ama, sirve a tu Iglesia, vuelve a ella si has tomado distancia y comparte con los hermanos la misión más grande de la tierra: anunciar y vivir el proyecto del Padre, la felicidad plena para todos sus hijos.
Cuando Dios invita a colaborar en su proyecto, sostiene su elección. Es él quien toma la iniciativa y apuesta por nosotros, aun con limitaciones y defectos. La Palabra de Dios llama, para todos hay una misión, en cada vocación específica se hac
El impacto de la Palabra es de tal grado que, transforma la historia de cada persona. Salir de experiencias poco saludables para compartir el evangelio, es una obra que Dios ha querido hacer, y repite en cientos de personas. Dejándo las heridas
Un misionero más que ir a enseñar, termina aprendiendo por la fe de la comunidad a la que es enviado. El fenómeno de compartir la fe es que se enriquece, en vez de terminarse; se multiplica y así se fermenta la tierra con el mensaje de Cristo.
Jesús es el enviado del Padre, y del mismo modo, nos envía a nosotros, en medio del mundo a prolongar su obra de amor. Los testimonios de vida, siempre son un reflejo de la voluntad divina que sigue obrando en la historia. Síguenos en las r
Pablo sintió un aguijón en su carne, pero fue ahí: en lo incomprensible, en las luchas consigo mismo, en la frustración por no desaparecer su problema… Fue ahí donde se encontró con Dios. Donde halló su fuerza.Te invito a ti a confiar en esa g
Ser misionero es ser instrumento del amor divino, somos llamados a ser portadores de Dios, de su paz y su Palabra, con todo el fuego, alegría y valiente afecto…Sin embargo, no todo es perfecto. Nuestra miseria es grande, tanto, que a veces nos
Dios sigue llamando a hombres y mujeres para colaborar en su proyecto de amor. Lupita nos comparte su testimonio con la invitación a todos a ser Misioneros por el mundo, pues la vocación no se reduce a la vida sacerdotal o religiosa, Dios llama
Encontrarnos con Dios y con los hermanos es esencial en la vida de un cristiano, pues en la medida que experimentamos el amor, lo compartimos. @misioneros_porelmundo FB: Misioneros por el mundo
Iniciando el mes de Octubre, mes de las misiones, compartimos juntos la experiencia de encontrarnos con Jesús, pues quien ha conocido a Dios, no puede callar. Hermanos y hermanas de distintas partes, que por un tiempo predicamos el Evangelio b